Hace varias noches que no puedo dormir. El ambiente estuvo raro desde aquel día. Me dolía el estómago de pensar en lo que venía; una sensación extraña, como que algo terrible está por ocurrir. Llegué a la casa y nos miramos a los ojos. El silencio decía más que nosotros. "Tenemos que hablar", dijo ella, rompiendo el silencio y nuestra relación....
miércoles, 5 de agosto de 2009
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